viernes, 15 de mayo de 2015

USOS QUE DESCONOCÍAS DEL ACEITE DE ALMENDRAS





El aceite de almendras se obtiene del fruto seco de un árbol llamado almendro. Al ser prensado en frío, se obtiene ese elixir que tantos beneficios nos aporta, tanto para la salud como para la estética. Entérate en el siguiente artículo para qué sirve el aceite de almendras y no dudes en comenzar a utilizarlo cuanto antes.
El aceite de almendras está compuesto por grasas monoinsaturadas, ácido oleico y ácidos linoleicos (como el Omega 3 y 6). El color es casi transparente, con toques amarillos o dorados, no tiene un aroma muy fuerte, sino dulce. Se puede emplear para hacer masajes o para uso externo, aunque no está recomendado para el consumo, algunas personas lo suelen utilizar en casos de estreñimiento.
¿Para qué sirve el aceite de almendras?
Como se decía anteriormente, el aceite de almendras puede ser usado de manera externa, pero no así interna (no es apto para consumir), salvo en casos donde se indique lo contrario. Por ello, es preciso consultar bien al momento de comprarlo.
El aceite de almendras tiene, mayormente, aplicaciones cosméticas, de belleza o estéticas, pero también ayuda en algunos problemas en la piel, como son los eccemas o el acné. Muchos productos de belleza lo incluyen entre sus componentes, tanto en cremas como en artículos para el cabello.
En el caso de usar aceite de almendras para hacer masajes, este ayuda bastante para calmar la ansiedad, los nervios y el estrés. Se utiliza por sus cualidades emolientes, es decir, que sirve en casos de afecciones cutáneas del tipo inflamatorio leve, como piel seca o herpes.
Reduce el prurito al proteger y suavizar tanto la piel como las mucosas. Se usa también para tratar la psoriasis y la dermatitis, calma el picor cuando hay erupciones cutáneas, disminuye los dolores, ablanda las partes inflamadas y alivia la irritación.
Más beneficios del aceite de almendras
Es bueno para el cabello
El aceite de almendras es excelente para las personas que sufren sequedad en su cabello, porque otorga brillo y suavidad al instante. Evita a su vez la calvicie, debido a su alto contenido en ácidos grasos oleicos. Al contener una buena cantidad de vitamina E, ayuda a mejorar la salud del cuero cabelludo, pudiendo mejorar notablemente los casos de caspa o dermatitis seborreica. Para disfrutar de sus beneficios, puedes colocar unas gotas de aceite de almendras en la palma de la mano después de bañarte y pasarlas por la punta del pelo o el cuero cabelludo. Otra alternativa es usarlo como un sustituto al acondicionador, dejando actuar algunos minutos y luego aclarando con agua tibia.
Es bueno para la piel
Como ya se dijo antes, el aceite de almendras es excelente para tratar diferentes problemas en la piel, sobre todo la sequedad, los eccemas o el acné. Todo ello se debe a los ácidos grasos que contiene, perfectos para hidratar la piel.



Permite también aumentar el aporte sanguíneo a los vasos de la dermis (al aplicar con movimientos circulares), así mantendrás tu piel en perfectas condiciones, tersa, suave, joven y radiante. Y como si fuera poco, al contener vitamina E, un excelente antioxidante, ayuda a mejorar el aspecto de la piel.
Una mascarilla perfecta para cuidar la piel se puede hacer con dos cucharadas de aceite de almendras, dos de aceite de soja, una cucharada de levadura de cerveza, tres cucharadas de avena y agua caliente. Mezcla bien los tres primeros ingredientes y luego añade de a poco la avena, para formar una pasta homogénea. Añade agua caliente y aplica en el rostro, dejando actuar durante 30 minutos. Enjuaga con agua templada.
Elimina las estrías
Entre las afecciones de la piel, las estrías son las que más molestan a las mujeres, después del parto, cuando han adelgazado demasiado, etc. El aceite de almendras es un excelente remedio casero para las estrías, ya que regenera la piel, la deja más humectada y suave. Esto es debido a los ácidos grasos y a la vitamina E. Además, este aceite permite reducir notablemente las arrugas del rostro o del cuello, si se aplica de manera temprana, cuando recién se forman las líneas de expresión.
Para aumentar la efectividad, puedes mezclar una cucharada de aceite de almendras con una cápsula de vitamina E (se vende en las casas naturistas) y con la piel limpia y seca, realizar masajes de manera circular al menos una vez al día. Una buena opción para las arrugas es aplicar una gota alrededor de los ojos, en la frente o la barbilla y masajear suavemente, dos veces al día, por la mañana y por la noche.
Trata el acné
Aquellas personas que sufran de acné, puntos negros o piel grasa, el aceite de almendras es uno de los pocos que pueden ayudarlas. Si bien tiene una buena cantidad de ácidos grasos, también cuenta con otros componentes y nutrientes que mejoran la piel del rostro, hombros, espalda y pecho de manera asombrosa. Puedes realizar una mascarilla con 30 ml de aceite de almendras, la yema de un huevo y una manzana.

La preparación es muy sencilla: pela la manzana, quita el centro y machaca la pulpa. Añade la yema del huevo y el aceite de almendras. Remueve bien y forma una pasta consistente. Aplica en el rostro o lugares afectados por los granitos y deja actuar durante media hora. Transcurrido ese tiempo, enjuaga con agua tibia y luego aplica una crema humectante no comedogénica (que no aumente la grasitud).