El aceite de coco es muy
útil para eliminar este tipo de plagas. Gracias a sus propiedades antibióticas
y antivirales evita la aparición de hongos y las infecciones
Los piojos y liendres son parásitos
que se alimentan de la sangre de la persona que los tenga y, además de ser muy
desagradables, también generan molestias como una fuerte comezón o pequeñas
lesiones en el cuero cabelludo.
Los niños suelen ser los más
afectados por esta plaga, debido a la facilidad de contagio que existe en
lugares como los jardines infantiles o las escuelas.
Por ello, es muy importante
que los padres estén muy atentos pues, de no detectarlos rápido, se pueden
propagar y llegar a afectar a otros integrantes de la familia.
En la actualidad hay muchos
tratamientos capilares y remedios comerciales que ofrecen una solución para
acabar con estos insectos y sus huevecillos; sin embargo, gran parte de estos
productos están cargados con químicos tóxicos que pueden provocar irritaciones en
la piel o ser muy agresivos para los niños.
Por suerte, también hay
soluciones naturales muy eficaces que pueden ayudar a tratar este problema
sin correr ningún tipo de riesgo y aportándole beneficios a la salud capilar. ¿Te
gustaría conocerlas?
Hojas de eucalipto
El olor penetrante de las
hojas de eucalipto ayuda a eliminarlos en poco tiempo, ya que
altera el ambiente ideal para los piojos.
¿Cómo utilizarlo?
Incorpora unas cuantas hojas
de eucalipto en una olla con agua hirviendo, déjala al fuego 5 minutos más y
luego retírala.
Cuando haya reposado unos
minutos y esté tibia, utiliza el líquido de la infusión para enjuagar la
cabeza, desde las raíces del pelo.
Hojas de romero
El romero se
conoce como una de las mejores hierbas para el cuidado capilar, ya que
tiene propiedades que fortalecen el pelo, frenan la caída y ayudan a mantenerlo
libre de plagas como los piojos y las liendres.
¿Cómo utilizarlo?
Consigue hojas de romero
fresco e incorpóralas en una olla con agua hirviendo durante 5 minutos.
Déjalo enfriar el tiempo
necesario y luego utiliza el líquido para lavar el pelo de la raíz hasta las
puntas.
Vinagre de manzana
Los ácidos del vinagre de
manzana tienen el poder suficiente para eliminar esta plaga y secar sus huevos.
Ten en cuenta que si hay
mucha invasión es muy probable que este remedio no sea 100% eficaz y
requiera de un complemento para óptimos resultados.
¿Cómo utilizarlo?
Prepara una mezcla 50/50 de vinagre
de manzana y agua, y luego aplícate el líquido por todo el cabello seco.
Esencia de lavanda
El aceite de lavanda tiene
un olor muy agradable para nosotros, pero para los piojos es lo más
molesto que hay.
Su fuerte aroma, sumado a
sus propiedades, puede ayudar a combatir estos pequeños bichos para
eliminarlos de una vez por todas.
¿Cómo utilizarlo?
Consigue aceite esencial de
lavanda en cualquier tienda naturista o herbolaria y aplícate una pequeña
cantidad por todo el cuero cabelludo.
Aceite de coco
Otro de los buenos aceites
para combatir los piojos y, de paso, aportarle nutrición al pelo, es
el popular aceite de coco.
Este ingrediente tiene
propiedades antibióticas y antivirales que previenen infecciones y hongos para
un cabello más saludable.
¿Cómo utilizarlo?
Toma unas cuantas gotas de
aceite de coco y aplícalo con suaves masajes por todo el cuero cabelludo.
Lo puedes utilizar a modo de
acondicionador ya que suaviza el pelo y le deja un brillo único.
Aceite de árbol de té
Este aceite esencial se
caracteriza por su acción antiséptica, antiviral y fungicida natural que
disminuye la irritación del cuero cabelludo y aporta alivio a la comezón
generada por las picaduras de los piojos.
Como en los casos
anteriores, su uso habitual disminuye la presencia de los piojos en el cabello
y, además, previene problemas como la caspa.
¿Cómo utilizarlo?
La primera opción es agregar
unas 15 o 20 gotas de aceite de árbol de té en tu champú habitual.
La otra consiste en aplicar
unas cuantas gotas sobre el cuero cabelludo y hacer suaves masajes con las
yemas de los dedos.
En ambos casos la dosis
debe ser mínima porque el exceso podría resultar perjudicial.
Ajo
El ajo es un ingrediente con
alto poder antibiótico y fungicida que, además de prevenir diferentes
tipos de hongos y gérmenes, también tiene un fuerte impacto sobre bichos como
los piojos.
Su alto contenido de
compuestos azufrados altera el ambiente adecuado para la supervivencia de estos
desagradables insectos y gracias a ello ayuda a mantenerlos alejados.
¿Cómo utilizarlo?
Muele una cabeza de ajo
completa y luego mézclala con medio litro de agua hirviendo.
Déjalo reposar, como mínimo,
un par de horas, cuela y frota el líquido por todo el cuero cabelludo antes de
ir a dormir. Cubre la cabeza con un gorro y déjalo actuar toda la noche.