Tener una alimentación
saludable se debería convertir en el estilo de vida de todas las personas, pues
es algo que mejora la salud desde muchos aspectos y con ello la calidad de
vida. Hoy en día las personas desarrollan diferentes tipos de enfermedades que,
aunque en muchas ocasiones no lo parezca, son producto de una mala alimentación
y un mal estilo de vida.
Si tenemos en cuenta la
gran cantidad de padecimientos que podemos desarrollar por no llevar buenos
hábitos alimenticios y de vida, vemos que es el momento de tomar consciencia
sobre la importancia de cuidar nuestro cuerpo y proporcionarle aquellos
nutrientes que necesita para funcionar correctamente y crear una barrera contra
dichas enfermedades. Una de las formas de darle un “empujón” a nuestro
cuerpo para que se mantenga saludable es a través del consumo de vinagre de
manzana, ajo y miel. ¡Sí! Leyó bien. Estos tres ingredientes tan comunes en
nuestra cocina pueden aportar muchas cosas a la salud, para prevenir
incluso enfermedades como el cáncer.
Ajo
El ajo es conocido por sus
múltiples beneficios para la salud, especialmente cuando se consume totalmente
crudo. Este alimento tiene propiedades que ayudan a reducir la presión
arterial, gracias a que también controla el colesterol y mejora la circulación.
Contiene selenio, que es un
compuesto con la capacidad de prevenir y revertir el daño celular, así como
combatir los radicales libres. Los investigadores han encontrado una
fuerte relación entre estas propiedades y la prevención del cáncer.
El ajo también tiene
propiedades antisépticas, que ayudan a combatir hongos, virus y bacterias,
manteniendo alejadas las infecciones y problemas como las gripes y resfriados.
Vinagre de manzana
Este producto se ha
utilizado con fines culinarios y en el hogar. Pero más allá de esos usos,
también se caracteriza por sus propiedades medicinales, que ayudan a
aliviar muchos problemas de salud como, por ejemplo, alergias, acné,
infecciones de los senos, gripe, colesterol alto, cándida, fatiga crónica,
dermatitis de contacto, dolores de garganta, gota, artritis y reflujo ácido.
Para obtener los beneficios
de este producto, es importante conseguir vinagre de manzana orgánico en lugar
de destilados o sintéticos.
Miel
Considerada como el mejor antibiótico
natural, la miel tiene la capacidad de reforzar nuestro sistema inmunológico,
incluidos los glóbulos blancos, que son los que nos ayudan a alejar las
infecciones, gripes y resfriados. Este alimento también se utiliza como
tratamiento para las heridas, para aliviar la tos y mejorar el proceso de
cicatrización.
¿Cómo combinar estos ingredientes para un
remedio natural contra las enfermedades?
Si tenemos en cuenta
que cada uno de estos ingredientes tiene mucho que aportarle a nuestra
salud y que pueden ser eficaces para prevenir enfermedades, lo ideal es
juntarlos para potenciar sus efectos. Al combinar el ajo, el vinagre
de manzana y la miel, tendremos un súper remedio natural que nos servirá
como tratamiento para reducir la presión arterial alta, catarros,
infecciones, así como problemas crónicos como el cáncer, el asma, la
artritis, la infertilidad y la impotencia.
Según varios
estudios, combinar las propiedades de estos tres alimentos hace un potente
remedio que puede ayudar a combatir las células cancerosas de muchas formas. A
los pacientes que se les administró esta mezcla se les notó una
mejoría muy significativa.
Para preparar esta receta no
requieres de ningún esfuerzo en especial, pues además de hacerse con
ingredientes realmente económicos, los pasos de preparación son bastante
simples.
Ingredientes
-1 taza de vinagre de sidra
de manzana (250 ml).
-1 taza de miel,
orgánica y sin pasteurizar (400 g).
-10 dientes de ajo.
¿Qué debes hacer?
En un frasco de vidrio
mezcla muy bien todos los ingredientes y agita durante unos 90 segundos. Lo
ideal es consumir este remedio en menos de 5 días, pues pasado este tiempo
se reducen muchas de sus propiedades. Lo puedes conservar en
el refrigerador, siempre y cuando lo tapes muy bien.
Para consumirlo puedes
empezar tomando dos cucharadas de la mezcla justo después de levantarte. Si el
sabor te resulta desagradable, también tienes la opción de diluirlo en un vaso
con agua o jugo fresco. Los primeros resultados de este remedio se conocen
después de dos semanas de consumo.